martes, 3 de mayo de 2011

El Paradigma Sociocultural y el Uso de la Tecnología en Actividades Pedagógicas

            El uso de la tecnología para la realización de actividades  pedagógicas es cada vez más común. Desde que surgió el Internet en la década de los 90, la aparición del correo electrónico, los diferentes programas mediante los cuales las personas podían acceder al conocimiento, y toda la gama de estrategias que fueron surgiendo como base para poder ser capaz de utilizar la nueva tecnología establecieron un nuevo modo de mirar la forma en que se lleva a cabo el proceso enseñanza-aprendizaje, especialmente cuando se habla de paradigmas y políticas que sustentan esta nueva tendencia. Fernández Cárdenas (2008) agrega al respecto que el Internet ofrece distintas aplicaciones que ayudan al establecimiento, afirmación y desarrollo de comunidades de práctica en ambientes virtuales. Las nuevas estrategias pedagógicas que utilizan la tecnología permiten llevar a cabo un intercambio de conocimientos que tiene como gran aliado el paradigma sociocultural.  

            Este paradigma cobija el uso de la tecnología en las actividades mediadoras del proceso pedagógico. Vygotsky y Piaget fueron los propulsores más conocidos de la perspectiva sociocultural. Juan Manuel Fernández Cárdenas (2009a) explica que Piaget se preocupaba por plantear una teoría psicológica que explicara cómo la medicación cultural era esencial en el proceso de aprendizaje, pero lo hizo desde un punto de vista de interacción individual. Lev Vygotsky, siguiendo la línea de la mediación cultural, propuso que el aprendizaje era el producto de la interacción del individuo en la sociedad, y el resultado de todas sus experiencias al hacer uso de todas las herramientas disponibles.


            En educación, y en especial cuando se habla de tecnología, las herramientas con que cuenta el individuo son fundamentales para lograr un buen desempeño. Es necesario en primera instancia que el docente prepare al educando para que adquiera todas las ¨armas¨ básicas para poder luego llevar a cabo un aprendizaje de calidad. En la teoría sociocultural está el planteamiento de que debe existir una apropiación de lo nuevo que se va a aprender y esto es mucho más fácil por medio de la vinculación social que pueda tener el individuo.


            Además, la construcción de estrategias y modelos basados en la tecnología posee una serie de ventajas que son propias de este tipo de enfoques. Una de estas grandes ventajas es el hecho de que estén centrados en la persona. Heredia y Romero (2007) hacen un análisis de cómo el diseño curricular de estos modelos que utilizan la tecnología como mediadora del proceso enseñanza - aprendizaje poseen una serie de características favorables para llevarlos a cabo. Entre los atributos mencionados por los autores están el que:


-         permite flexibilidad en el tiempo y espacio,


-         está en constante cambio ajustando sus estrategias, sus programas, y sus contenidos para que respondan a las necesidades actuales que demanda la sociedad,


-         incrementa la motivación por aprender, facilita una mayor retención de lo aprendido, un conocimiento más profundo de las temáticas y una actitud más positiva hacia la materia,


-         hace que el estudiante desarrolle sus talentos y capacidades en diferentes áreas, e


-         supone una interacción de todos los niveles de implicación en la acción educativa.   


             Otro gran aspecto a tomar en cuenta es que la implementación de la tecnología a nivel educativo no es solamente un asunto de variar programas, incluir estrategias pedagógicas o invertir en material de punta como los pizarrones interactivos. Es también un reto el tema de la administración tecnológica, y especialmente las políticas institucionales que puedan acompañar estos programas. A medida que las políticas institucionales respalden la implementación de este tipo de modelos, el porcentaje de éxito del modelo en sí y de quienes lo usan será muy alto. Pero para esto también se requiere que la administración de los recursos humanos disponibles sea satisfactoria. López Falconi indica que es en la ¨administración del capital humano donde se encuentra el desarrollo de prácticas de valor, a través del intercambio de conocimiento entre individuos y grupos de trabajo de la organización¨ (2010, p. 137). La tecnología con sus diferentes herramientas sociales permite que se lleve a cabo todo este intercambio que menciona este autor y que hace que se produzca una verdadera apropiación de los conocimientos.


            En adición a lo antes mencionado, el rol que cumplen las instituciones educativas y las políticas que apoyan este tipo de estrategias requiere de una serie de elementos para su buen desarrollo y consolidación. Según Gértrudix Barrio y colegas (2007), estos programas están en desarrollo y para la creación, distribución y uso de programas que estén constituidos por objetos digitales educativos se necesita que:


1-     El sistema educativo y los actores involucrados tengan claro cómo se aplican las            tecnologías de la información y comunicación (TIC).


2-      Se creen, distribuyan y evalúen materiales digitales educativos de calidad.


3-      Se utilicen las nuevas tecnologías para impulsar la adquisición de competencias que permiten obtener lo mejor de las TIC.


4-      Se promueva la investigación y el desarrollo de ODE en todas las instituciones educativas.


5-      Se consolide el desarrollo del trabajo colaborativo como  la base para la producción de contenidos que son elaborados, utilizados y evaluados por diferentes entidades.


6-     Se apliquen estándares para el desarrollo de contenidos educativos digitales abiertos.


            En resumen, en la actualidad existe una tendencia marcada a utilizar la tecnología como parte inherente ya del proceso enseñanza aprendizaje. La relación entre el paradigma sociocultural y un modelo pedagógico que implique el uso de la tecnología es una realidad por los atributos que posee esta teoría estudiada por Piaget y Vygotsky. El poder hacer del educando el centro de atención en el proceso pedagógico y buscar satisfacer todas sus necesidades hacen de estos modelos un arma efectiva en manos del docente que le sabe sacar provecho. Es evidente que la capacidad de intercambio de información que poseen las nuevas tecnologías de la información y comunicación hace de estas estrategias tecnológicas una manera contundente de lograr la adquisición del conocimiento por parte de los aprendices. Aun cuando este tema parezca nuevo y se encuentre en proceso de desarrollo, ya existen una serie de instituciones que hacen uso de este tipo de modelos de trabajo y que miran cómo los resultados son altamente provechosos tanto para el educando como para la institución como tal, en un marco de apoyo de las políticas institucionales y educativas.    





Referencias:


            Fernández-Cárdenas, J. M. (2009a). Las tecnologías de la información y la comunicación desde la    
                        perspectiva de la psicología de la educación. (J. Arévalo Zamudio, & G. Rodríguez Blanco, 
                        Edits.) México, Distrito Federal, México: Secretaría de Educación Pública/Dirección General
                        de Materiales Educativos.



Gértrudix Barrio, M., Álvarez García, S., Galisteo del Valle, A., Gálvez de la Cuesta, M. C.
y Gértrudix Barrio, F. (2007). Acciones de diseño y desarrollo de objetos educativos digitales: programas institucionales. Revista de Universidad y Sociedad del conocimiento, 4, 1, 14-25. Disponible en: http://www.raco.cat/index.php/RUSC/article/view/58131/68223



Heredia Escorza, Y., & Romero Murguía, M. E. (2007). Un nuevo modelo educativo centrado en la 
            persona: compromisos y realidades. En A. Lozano Rodríguez, & J. V. Burgos Aguilar,
           Tecnología Educativa en un Modelo de Educación a Distancia Centrado en la Persona (págs.
           53-75). México: Limusa.



López Falconi, J. E. (2010). Comunidades de prácticas de valor para el aprendizaje organizacional.
            En Burgos Aguilar, V. & A. Lozano Rodríguez (Comp.). Tecnología educativa y redes de
            aprendizaje de colaboración. Distrito Federal, México: Trillas.



Muñoz Sheridan, A. (2008). Factores implicados en la conformación de redes escolares con el
             soporte de un portal educativo: Un enfoque de comunidades de práctica docente. En J. M.
             Fernández-Cárdenas, & C. Carrión-Carranza, Escenarios virtuales y comunidades de práctica.
             La participación docente en la Red de Escuelas Asociadas a la UNESCO (págs. 95-115).
             Monterrey: Comité Regional Norte de Cooperación con la UNESCO.